La Organización Mundial de la Salud define la atención integrada como el conjunto coherente de métodos y modelos en los niveles de financiación, administrativo, organizativo, de prestación de servicios y clínico diseñados para crear conectividad, alineación y colaboración dentro y entre los sectores asistenciales.

El objetivo de estos métodos y modelos es mejorar la calidad de la atención, la calidad de vida y satisfacción del usuario y la eficiencia del sistema. Desde el punto de vista de la usuaria, este modelo de gestión integrada se ve como el mecanismo que “me permite planificar mi atención con personas que trabajan juntas para comprenderme a mí y a mis cuidadores, permitirme controlar y reunir servicios para lograr los resultados que son importantes para mí”. 

Ambas definiciones, desde el punto de vista tanto de CEDI-Mujer como de la usuaria, puntualizan los elementos esenciales que deben conformar la atención integrada: un sistema de gestión único, común para todos los actores implicados en la provisión de los servicios; centrado en la usuaria y sus necesidades, que mejora la eficacia, reduce costos y logra altos niveles de satisfacción.

La Gestión integrada de Casos identifica en primer lugar las necesidades de las usuarias, diseña un itinerario o plan de intervención y coordina las actividades correspondientes incluyendo las relativas al entorno de las usuarias, con una gestora asignada responsable de velar porque la usuaria logre completar su plan, canalizando los recursos que sean necesarios y asegurando una atención integral y un acompañamiento constante.